La OIT actualiza sus recomendaciones sobre la legislación cooperativa

27 Dec 2012

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La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha publicado una actualización de su publicación que contiene recomendaciones sobre la legislación cooperativa. El libro, en su tercera edición, está escrito por Hagen Henrÿ y se basa en la Recomendación 193 de la OIT sobre la Promoción de Cooperativas.

El lema del libro "Las empresas cooperativas construyen un mundo mejor, pero las cooperativas no pueden - ni deben - salvar el mundo", subraya que las cooperativas no deberían ser vistas simplemente como una "panacea" en situaciones de crisis.

La publicación tiene como objetivo mostrar lo que las cooperativas son y cómo funcionan, qué tipo de legislación es necesaria para garantizar un mayor desarrollo de las cooperativas y cómo la legislación puede redactarse. El libro también revela que, a pesar de una mayor cantidad de legislación cooperativa, también hay una tendencia de alinear la legislación cooperativa con la legislación para empresas de capital.

Las recomendaciones dejan lugar para las particularidades nacionales, sin embargo, tratan de alentar a los legisladores a tomar en cuenta las normas generalmente aceptadas internacionalmente. Las leyes nacionales son necesarias para implementar el derecho internacional público para las cooperativas, de los cuales la Recomendación 193 constituye el núcleo, según el señor Henry, ex jefe de la organización para las Cooperativas de la OIT.

Una de las dificultades más grandes cuando se trata de armonizar la legislación cooperativa, es el riesgo de causar que los movimientos cooperativos se desintegren y pierden muchos de sus rasgos comunes.

El Sr. Henrÿ dijo: "La problema de armonización es importante porque la cuestión en nuestro mundo global es sobre el tipo de empresa sin ninguna referencia a su base nacional".

El libro también aborda la cuestión de las "pre-cooperativas" y el hecho de que la mayoría de dichas entidades, a veces alentados con el fin de favorecer el rápido desarrollo de las cooperativas, no se han convertido en cooperativas autónomas, continuando a depender de la ayuda externa.

Las recomendaciones subrayan que la legislación cooperativa debería basarse en un enfoque participativo, que permite no sólo a los cooperativistas, sino también a las partes interesadas a participar en la definición y diseño de la ley. "Esta ley participativa de decisiones difíciles en algunos países porque no hay sindicatos o federaciones cooperativas eficientes ", dijo el Sr. Henrÿ.

La publicación también está enfocada en la educación, mencionando que la legislación cooperativa no ocupa un lugar prioritario en los programas de educación e investigación. "Todas las personas interesadas en las cooperativas deberían tratar de hacer de ellos una parte objeto de los programas de educación. Si se estudia la ley ¿por qué no estudiar algo sobre la legislación cooperativa?", dijo el Sr. Henrÿ.

El libro también explica cual es la diferencia entre una legislación general y una legislación detallada. Una legislación muy detallada puede atentar contra la autonomía de las cooperativas de hacer sus propias reglas a través de sus estatutos. Por otro lado, si la ley no es lo suficientemente detallada, el gobierno puede intervenir y llenar los vacíos en la regulación. "Entonces podríamos tener una brecha entre lo que el Parlamento como legislador quiere y lo que el gobierno quiere. Pero también podría significar que las cooperativas darían muchos detalles en sus estatutos y los socios de negocios de estas cooperativas 'no estarían muy claro lo que prevalece", explicó el Sr. Henrÿ.

El añadió que la ley puede ser prescriptiva "porque esa es la naturaleza de la ley", pero al mismo tiempo puede "permitir que las cooperativas funcionan como un modelo empresarial cooperativo".

El Sr. Henrÿ cree que aún si "las cooperativas deberían poder funcionar en cualquier sector", también es importante entender por qué hay restricciones. La Recomendación 193 de la OIT pide a los legisladores que permitan que las cooperativas participen activamente en todos los sectores.

"Cuando se trata del sector financiero a menudo hay una razón por lo cual hay restricciones. No existen mecanismos prudenciales que de hecho podrían supervisar las instituciones financieras cooperativas. Eso se debe al hecho que estos sistemas de monitoreo son para otros tipos de empresas ", explicó en Sr. Henrÿ.

Aunque es importante reconocer las cooperativas como entidades legales, el libro subraya que esto no debería ser un fin en sí mismo. El libro añade: "La ley cooperativa, por sí misma, no cambia nada. Para tener un movimiento cooperativo eficiente y que puede prosperar la ley debe ser aplicada".

Según Simel Esim, la Directora de la organización sectorial para las cooperativas de la OIT, 70 países han revisado su legislación sobre cooperativas en consonancia con las disposiciones de la Recomendación 193 y la dirección ha sido hacia una mayor autonomía e independencia.

Haga clic aquí para leer la publicación [en Inglés]

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